La amistad: camino hacia la paz
En unos tiempos en los que el ruido de la división se hace cada vez más ensordecedor —alimentado por guerras, conflictos, desigualdad y miedo—, la amistad parece casi un acto radical en su sencillez. No llega con fanfarria ni políticas; no necesita discursos ni firmas. Comienza con algo más silencioso: una conversación, un momento compartido, la voluntad de vernos unos a otros no como extra?os, sino como compa?eros y compa?eras de camino en la vida.
La celebración de este a?o del Día Internacional de la Amistad, trata de recordar que la paz verdadera no se forja solo en las salas de negociación o mediante la redacción de tratados, sino que construye poco a poco, en la confianza que nos otorgamos unos a otros en la vida cotidiana.
La amistad, especialmente entre la gente joven, tiene un poder muy especial. Puede traspasar las barreras del idioma, la religión y la historia que, de otro modo, podrían dividirnos. Nos invita a escuchar antes de juzgar, a quedarnos cuando es más fácil marcharse. Cuando se cultiva entre culturas y comunidades, la amistad se convierte en algo más que un vínculo: se convierte en un modelo para la reconciliación. Nos ense?a que la comprensión no es un gran logro, sino un hábito, una práctica, una forma de moverse por el mundo que dice "tu bienestar también me importa".
Este a?o, mientras el mundo se enfrenta a profundas fracturas —entre naciones, en el seno de las sociedades e incluso en ámbito familiar—, el llamamiento a la amistad no es solo cuestión sentimental. Es esencial. Se trata de superar lo que nos separa y atrevernos a creer en algo mejor. Es un llamamiento a imaginar un futuro en el que la diferencia no signifique distancia, en el que la confianza sea más fuerte que el miedo. A través de la amistad, no solo afrontamos el mundo tal y como es, sino que empezamos a dar forma al mundo tal y como podría ser.
Antecedentes
La Asamblea General designó en 2011 el con la idea de que la amistad entre los pueblos, los países, las culturas y las personas puede inspirar iniciativas de paz y presenta una oportunidad de tender puentes entre las comunidades.
Para conmemorar el Día Internacional de la Amistad, la ONU alienta a los gobiernos, las organizaciones internacionales y los grupos de la sociedad civil a celebrar eventos, actividades e iniciativas que contribuyan a los esfuerzos de la comunidad internacional para promover un diálogo entre civilizaciones, solidaridad, comprensión mutua y reconciliación.
La resolución () pone un especial énfasis en la importancia de implicar a los jóvenes y a los futuros líderes en actividades comunitarias encaminadas a fomentar la inclusión de las distintas culturas y el respeto entre ellas, promoviendo a la vez la comprensión internacional y el respeto de la diversidad.
El Día Internacional de la Amistad es una iniciativa que se remonta y parte de la propuesta hecha por la UNESCO tratada y aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1997 (), que definió la Cultura de Paz como un conjunto de valores, actitudes, y conductas que rechazan la violencia y procuran prevenir los conflictos, abordando las causas profundas con el objetivo de resolverlos.
Dos a?os después se adoptaría la Declaración y Programa de Acción sobre una Cultura de Paz (), la cual estableció 8 líneas de acción que las naciones, organismos y personas pueden emprender para que prevalezca una cultura de paz.
Acciones para promover una cultura de paz
- Promover una cultura de paz mediante la educación.
- Favorecer el desarrollo económico y social sostenible.
- Fomentar el respeto de todos los derechos humanos.
- Garantizar la igualdad entre las mujeres y hombres.
- Propiciar la participación democrática.
- Impulsar la comprensión, la tolerancia y la solidaridad.
- Apoyar la comunicación participativa y la libre circulación de información y conocimientos.
- Promover la paz y la seguridad internacionales.